viernes, 24 de agosto de 2007

Revolución Azul


En 1990 fue el fin de la ayuda soviética para Cuba, los años posteriores de escasez hicieron que programas desesperados de autoabastecimiento fueran implementados en la isla, incluyendo la llamada “Revolución Azul” que promovía la construcción de pequeños estanques para que las familias cubanas criaran sus propios pescados y mejorara la dieta alimenticia de la población. Así lo hizo Macario, un afamado habitante del poblado Camilo Cienfuegos en Sta. Cruz del Norte, sin saber que terminaría criando la mayor amenaza biológica que la isla haya conocido.

In 1990 it was the end of the Soviet help for Cuba, the later years of shortage made that desperate programs of social help were implemented in the island, including the called “Blue Revolution” that promoted the construction of small ponds so that the Cuban families raised their own fish and improved the population nutritious diet. Macario did it this way, a famous inhabitant of the town Camilo Cienfuegos, without knowing that he raised, like many others, the biggest biological threat that the island has known.

LA REVOLUCIÓN AZUL SE HACE EFECTIVA EN LOS FESTIVALES DEL MUNDO. Espérala en tu pais.

SELECCIÓN OFICIAL - Festival Expresión en Corto Guanajuato 2007 - Guanajuato, Mexico. ver aqui
SELECCIÓN OFICIAL - Festival DOCSDF 2007 - Distrito Federal, Mexico. ver aqui
SELECCIÓN OFICIAL - Festival Internacional de Cine Pobre 2007 - Jibara, Cuba

SELECCIÓN "LA OTRA MIRADA" - Festival Nuevos Jovenes Realizadores 2007 - Habana, Cuba
SELECCIÓN OFICIAL - Festival Internacional Cancun 2007 - México.
SELECCIÓN MUESTRA INTERNACIONAL - Festival "Festivalito" 2007 - Islas Canarias
SELECCION OFICIAL - FENACO 2007 - Peru.
SELECCION HECHO EN CUBA - Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano 2007 - Cuba
SELECCIÓN Finalista - Cinemad 2007 Cine independiente y de culto - Madrid, España. ver aqui

ZURE VISION SOCIAL - Muestra de cine y cooperación 2008 - Gasteiz, Bilbao, Irun, Donostia. ver aqui

GANADOR MEJOR GUION en Festival Cine Plaza 2007 - Cuba
GANADOR MEJOR GUION y EDICION en Festival Camaguey 2007 - Cuba
MEJOR DOCUMENTAL PREMIO Hermanos Saiz CARACOL 2007 - Cuba

GÉNERO: Documental / Documentary

DURACIÓN: 10 min.

Dirección: Fabián Archondo

Producción: Ángel Urrutia

Guión: Gabriela Almeida

Fotografía: Álvaro Rodríguez

Sonido: Valeria Mancheva

Edición: Fabricio Deza

Animaciones: Leopoldo Nakata y Fabián Archondo

Ilustraciones: Gabriela Almeida y Leopoldo Nakata

Música Original: Elvira Peña

Personajes: Macario Toledo, Guillermo García.


¿QUE SON LOS PECES CLARIA? - Descúbrelo proximamente o haz click en la imagen.



La Acuicultura Familiar es una iniciativa del gobierno cubano para que los habitantes se puedan suministrar sus propios alimentos, uno de los programas implementados por ellos se llamó "Revolución Azul", si quieres saber aún mas haz click en la imagen.


IMAGENES EXCLUSIVAS DEL CORTO DOCUMENTAL "REVOLUCIÓN AZUL"







BIOGRAFIA DEL DIRECTOR

Fabián Archondo

Nacionalidad: mexicana. Nació: Nueva Rosita, Coahuila, 28 de Febrero de 1981. Educación: Estudió la licenciatura en comunicación en la Universidad de Monterrey con una sub-especialidad en mercadotecnia, actualmente estudia la carrera de dirección cinematográfica en la Escuela Internacional de Cine y Televisión en San Antonio de los Baños, Cuba.

Filmes como director:

2000 Proyecto Skinner (video-corto) Duración: 14 min.

2001 Maladies (video-corto) Duración: 20 min.

2005 La naturaleza del mal (video-corto) Duración: 1.20 min.

2006 Obsesión frustrada (16mm-corto) Duración: 6 min.

2007 Revolución azul (video-documental) Duración: 10 min.

2007 La trinidad (video-corto ficción) Duración: 10 min.

* * *

Apasionado cinéfilo que a partir de los 9 años, en que presenció una proyección pública de un filme de espías en la macro plaza de Monterrey, México, se decidió a conjuntar la comunicación audiovisual y el arte de contar historias como su único oficio posible. Al iniciar la carrera de comunicación se involucró profundamente con la labor radiofónica en programas totalmente auto producidos dedicados al séptimo arte en la estación universitaria radio UDEM, lo que le permitió desarrollar sus criterios en el análisis cinematográfico para el éxito posterior del programa “Cinefilia: Grand Café” en la radio gubernamental de corte cultural Opus 102.1 FM del estado de Nuevo León, donde desarrollaba sus habilidades argumentales con dramatizaciones y programas conceptuales llegando a tener uno de los programas con mayor raiting de la estación.

Durante el curso de su carrera como comunicólogo incursionó en el cine con pequeños trabajos en video, de muy bajo presupuesto, en cortometrajes como “Proyecto Skinner” (2000) y “Maladies” (2001), este último presentándose exitosamente en el marco del Festival Voladero 2002 en la sección de Cine Regiomontano Reciente.

Después de un breve desempeño como maestro auxiliar en su alma mater y ejercer como free lance en videos institucionales de la localidad, fue aceptado su ingreso en la Escuela Internacional de Cine y Televisión en San Antonio de los Baños, Cuba, en la especialidad de dirección, en esta institución educativa ya se han producido trabajos como “Naturaleza del mal” (cortometraje en video) y “Obsesión Frustrada” (cortometraje en 16 mm), hasta el corto documental “Revolución azul” de asombrosa aceptación en el cuerpo académico y profesional asi como algunos festivales internacionales.

CONTACTO: farchondo@gmail.com

PRENSA

“Expresión en Corto” en corto Reviewing the film festival
By Atención staff

Expresión en Corto, the international short film festival, celebrated its 10th anniversary here in San Miguel from July 20–24. Opening night at the Angela Peralta and Bellas Artes received mixed reviews—too many speeches, the food was mediocre, they ran out of red wine early and didn’t offer white, the black tie certainly seemed optional; but all was forgiven and forgotten when actress Josefina Echánove took the stage and delighted the audience with her charm, wit and timeless beauty.


The Sierra Nevada hosted a memorable cocktail party Saturday evening complete with exotic margaritas, hors d’ouevres that can only be described as edible art and terrific music by Frank Bravo y Su Son Sonido.


Some who expected to get in at midnight found out after standing in line for an hour that they would have to wait for the 2am showing. Those who had luckier timing reportedly had a wonderful time. As for the rest, their only consolation was in knowing they’re sure to get there someday. Maybe next year reservations will be available for limited-space events.

All in all the crowds were impressive and the reviews quite good. The Teatro Santa Ana had smaller audiences, partly because they were showing feature-length films and partly because they were scheduled to show older movies like Top Hat and Easy Rider. The documentaries were well attended and well made, according to José Luis Mendoza, Director of Art and Culture, “The Blue Revolution was particularly interesting; it’s about the unintended consequences of introducing one fish species into waters which eventually led to the decimation of the local fish life.” The Cuban government sponsored the program to help rural families raise their own fish and instead ended up “raising the biggest biological threat the island has ever known.” The film was directed by Fabián Archondo.

The festival continues in Guanajuato from July 25–29. Filmmaker Dora Guzmán will present the short film her 15 students made during her workshop, with a number of scenes filmed at Teatro Santa Ana. This work will be presented at the premier in Guanajuato and all the kids involved will be there along with President Felípe Calderón and a number of directors and celebrities.

Publicado el sábado 19 de enero del 2008

Voraz pez caminador pone en peligro el ecosistema cubano

El Nuevo Herald

El pez gato o claria se ha convertido en una amenaza para el ecosistema cubano.

La historia del pez gato caminador en Cuba hubiera deslumbrado a Jack Arnold, el artífice del filme El Monstruo de la Laguna Negra (1954). O tal vez sea Steven Spielberg quien termine cautivado por las terríficas aventuras de esta especie que vive en los estanques, presas y hasta conductos albañales de la isla.

Introducido en la isla para aumentar el consumo de proteínas de la población durante los años del llamado "período especial'', el pez gato o claria se ha convertido en pocos años en una poderosa amenaza para el ecosistema nacional.

El pez es originario de Asia y bajo su nombre se agrupan unas 2,000 especies extendidas por India, el sudeste asiático, Indonesia y el norte de Africa. Carnívora y altamente depredadora, la claria se cría en agua dulce y tiene capacidad para buscar alimentos fuera de sus estanques, deslizándose por tierra mediante fuertes sacudidas de la cola.

Su expansión incontrolada en Cuba durante la última década está provocando serios estragos en la fauna y vegetación acuáticas, el equilibrio ecológico y la vida doméstica. No sólo arrasa con tilapias y ranas, sino que también ataca a aves y ratones, y puede introducirse en cuevas subterráneas, alcantarillados y tuberías caseras.

"Considero que es la mayor amenaza para el ecosistema del país en este momento'', opinó el biólogo marino Guillermo García, residente en la isla. "Se comen las tilapias, se comen entre ellas mismas, las tencas, un pollo, una ranita, cualquier animal, cualquier cosa que se mueva fuera del control de los humanos''.

García ofreció este testimonio en Revolución azul, un documental realizado en el 2006 por el joven cineasta mexicano Diego Fabián Archondo. El filme de apenas 10 minutos podrá verse hoy a las 6:00pm, por AmericaTeVe (canal 41) en el programa La mirada indiscreta, conducido por el crítico Alejandro Ríos.

El documental de Archondo, estudiante de la Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños, en las afueras de La Habana, trata de la preocupante proliferación de las clarias en la cotidianidad cubana. El cineasta viaja hasta el pueblo de Hershey, en la provincia de Matanzas, donde un chinocubano llamado Macario Toledo muestra las clarias que crecen en un estanque en el patio de su casa.

El título del documental proviene del nombre de un programa popular establecido en 1990, cuando la agudización de la crisis económica hizo que el gobierno autorizara la construcción de pequeños estanques hogareños para que las familias pudieran criar peces comestibles. Se estima que las clarias comenzaron a entrar en Cuba entre 1995 y 1996, procedentes de Tailandia.

Toledo, un comunista fiel e integrante del Ministerio del Interior (MININT), asegura que la cría de su estanque le ha permitido abastecer no sólo sus necesidades hogareñas, sino también saciar la demanda de comedores obreros y algunas pescaderías en el pueblo.

Sin embargo, las propias autoridades cubanas han dado ya la alarma sobre el pez gato caminador o clarias batrachus, que es la especie más conocida en la isla.

Según datos del Centro Nacional de Areas Protegidas, las clarias amenazan potencialmente en el medio natural a 242 especies de la fauna cubana, de las cuales 75 son endémicas, 29 raras o locales y 25 introducidas. Una de las zonas de mayor peligro es la Ciénaga de Zapata, reservorio natural cubano, donde se han capturado clarias con jicoteas y cocodrilos pequeños en su estómago.

El Ministerio de la Industria Pesquera (MIP) se vio obligado en el 2006 a emitir una resolución para fijar una estrategia de seguridad biológica en el país y "revertir episodios desfavorables como el de la claria o pez gato caminador''.

Las clarias han demostrado ser tan voraces como invasivas. Al parecer los problemas comenzaron cuando los primeros ejemplares en cautiverio escaparon de las pocetas y llegaron a ríos, lagunas y presas, así como a criaderos particulares. Las primeras fugas se originaron por las inundaciones de pocetas a consecuencia de las lluvias, pero también porque los alevines de pez gato se comercializaron en el mercado negro interno como una verdadera promesa alimentaria.

"Aquí se decía que era un alimento con mucha proteína, que los vietnamitas ganaron la guerra con la fuerza que les dio la carne de claria'', narró Filiberto Núnez, un mecánico de Jagüey Grande, en Matanzas.

Otras personas trataron de adaptarlo a sus peceras como una especie exótica ornamental. Las clarias más comunes miden entre 50 y 60 centímetros, con una aleta dorsal muy larga y ocho hilos de bigote sobre una boca de gran capacidad devoradora.

Hace dos años la prensa cubana reportó el caso de Humberto Navarro, un residente de Matanzas que se quejaba de una persistente tupición en las tuberías de su casa. Cuando Navarro pasó una cinta metálica por los tubos de desagüe, se encontró al causante del problema: un pez negrusco de cerca de tres libras que lo miraba chorreando lodo de fosa.

Algunos las pescan incluso en alcantarillas en plena calle.

"En Cuba la han bautizado como pez diablo'', escribió el periodista independiente Juan González Febles. "Los paleros [santeros] dicen que el animalito es africano y está consagrado a Eshu, el diablo en la Regla de Palo Mayombe''.

La invasión de las clarias transcurre fundamentalmente en la zona occidental y central del país, desde Pinar del Río hasta Sancti Spíritus. Se produce también en los muy contaminados ríos Almendares y Luyanó en La Habana.

"Es como una cloaca ambulante'', contó Pedro Díaz, un agricultor pinareño. "Se come lo mismo los huevos de los nidos o muerde a un puerco en un corral lleno de fango".

No obstante Cuba insiste en que la introducción controlada de la claria en la acuicultura nacional produce rendimientos productivos como los de ninguna otra especie. El pasado año una empresa acuicola en La Sierpe, provincia de Sancti Spiritus, reportó haber sembrado en abril 96,000 alevines de claria, con la obtención de 80,000 con talla comercial adecuada tan solo cuatro meses después.

La claria se utiliza mayormente para elaborar embutidos, perros calientes y chorizos en las industrias locales.

El documental incluye también referencias a los presuntos experimentos transgénicos realizados por la biotecnología cubana con las clarias para aumentar su crecimiento.

"El cine burlón realizado por jóvenes en la isla se ríe de las tropelías que causan el hambre y la ineficiencia económica'', expresó Alejandro Ríos. "Entre las vacas enanas que van a garantizar la leche y las voraces clarias, Cuba se ha convertido en un país de ciencia ficción''.

CONTACTO: farchondo@gmail.com







Depredadores en peligro

Adrián Leiva (6 de Agosto de 2008)

LA HABANA, Cuba, agosto (www.cubanet.org) - Hace unos días el periódico Juventud Rebelde publicó un artículo acerca de la pesca de un enorme tiburón dientuso. Se destacaron las dimensiones del escualo: cerca de cuatro metros y más de 700 libras realmente resultan dimensiones cada vez menos frecuentes en este tipo de especies. No por gusto cada año se hacen campañas informativas acerca de los tiburones. Con ello se eliminan ciertos mitos sobre ellos, destacando la importancia de protegerlos. No fue la suerte que corrió la hembra del dientuso, que se aventuró en el litoral habanero y que estaba preñada en el momento de producirse su captura. Algo como para sembrar el luto en la comunidad de oceanólogos.

Las costas cubanas, en especial las que bañan la capital del país, observan un deterioro evidente. Los que se adentran en sus aguas, absortos más en el problema del diario subsistir que en problemas de conservación natural, no tienen en cuenta los llamados del mundo científico. De esta manera desaparecen miles de especimenes acuáticos en esa zona, afectados por la faena intensa de pescadores autorizados o por cuenta propia. Esta depredación humana ha arrasado con pulpos, cacerolas marinas (también llamadas cucarachas de mar) y pequeños caracoles, todos pasados a mejor vida en improvisadas sopas salvadoras. Esto para no tocar el problema de los corales y otros habitantes del que rodean la isla.

Hace unos días me contaba un amigo residente en el barrio Obrero, en San Miguel del Padrón, una anécdota ocurrida en esa zona y que habla del talante depredador que se ha apoderado de la gente. La caída de un copioso aguacero había provocado la avalancha de las aguas que corrían por las calles buscando la boca de alcantarillas casi inexistentes. De pronto algo llamó la atención de los pocos transeúntes que desafiaban la lluvia. Un extraño animal saltaba casi en el contén de la acera. Al acercarse pudieron ver que se trataba de una claria, también conocido como pez gato.

La curiosidad de mi amigo por ver este feo animal fue interrumpida por la avidez de una mujer que le preguntó si pretendía quedarse con el pez. Ante la respuesta negativa del curioso, la señora la emprendió a sombrillazos limpios con la “bestia”, llevándosela a casa. No fue el único que corrió igual suerte. A medida que iban apareciendo otras clarias, los vecinos, alertados de su presencia, salían a cogerlas.

Este extraño híbrido de dos especies similares, creación cubana para resolver el problema alimentario (de ella se obtiene el picadillo que se vende en las pescaderías) se hizo notorio a través del corto fílmico Revolución Azul, realizado en 2006 por el mexicano Diego Fabián Archondo. El joven director de la Escuela de Cine Latinoamericano de San Antonio, destacó en su material algunas características del engendro, capaz no sólo de sobrevivir fuera del agua por varios días, sino incluso de trasladarse por tierra. Otros aspectos señalados en esta rareza eran su voracidad, que le hace ingerir ratones, ratas y hasta pequeños pollos.

Sin embargo, estos terribles depredadores no llegan a ser ni una quinta parte de la amenaza que los bípedos significan para ellos. La escasez de comida en Cuba hace que ni los tiburones, ballenas, peces clarias y cuanto bicho se mueva, queden fuera del interés de los estómagos cubanos. Pareciera que nuestra gente ha hecho suyo cierto refrán atribuido a los chinos, según el cual todo lo que camina, vuela, nada o se arrastra, es comestible.

CONTACTO: farchondo@gmail.com

Alejandro Rios (New Herald)

Hace cuestión de dos años, se testimonió cinematográficamente la existencia de un raro y voraz monstruo anfibio en ríos, estanques y presas cubanas gracias al documental Revolución azul, del estudiante mexicano de cine en San Antonio de los Baños, Diego Fabián Archondo. El argumento, desarrollado en apenas 10 minutos con mordaz humor, resultó ser fascinante: un miembro retirado del Ministerio del Interior, con residencia en el legendario pueblo de Hershey, cría animales como autoabastecimiento alimentario para su familia y algunos vecinos cercanos, costumbre heredada del llamado período especial cuando, supuestamente, la economía de la isla tocó fondo, luego de la desaparición del campo socialista de donde procedía casi toda la manutención del país.

Entre sus criaderos, el personaje en cuestión, ostentaba un estanque en el patio de la casa donde albergó, displicentemente, la llamada claria, una especie de pez gato procedente de Asia que, según diversas fuentes periodísticas, fuera genéticamente alterado en laboratorios cubanos para acelerar su reproducción y crecimiento y, de tal modo, paliar la precaria canasta familiar nacional. El resultado es un espécimen insaciable que, cual cloaca natural, deglute todo tipo de presa que se encuentre a su paso sea en el agua, su habitat natural, o por tierra, donde puede reptar alrededor de tres días en busca de más alimento o un mejor lugar donde vivir.

En casi medio siglo de porfiada existencia ya se sabe que los tres más grandes problemas, no resueltos aún, que ha debido afrontar la revolución ''roja'' de los Castro es garantizar el desayuno, el almuerzo y la comida de sus coterráneos. En estos días, mientras el arcaico dictador se ocupa de dilucidar, desde su cama de convaleciente, acuciantes crisis internacionales, el nuevo mandatario se apresura en solucionar la desolación de la culinaria criolla a como dé lugar, afirmando que del comestible puntual depende el futuro de su disparatado experimento social.

Antes del arribo de la claria, hubo momentos no menos delirantes en los esfuerzos zoológicos por buscar una solución casi mágica a la incapacidad de producir bienes y alimentos que persigue, como un maleficio, a los hermanos Castro.

Indistintamente, los hogares cubanos dieron la bienvenida a diminutos pollitos, conminados a crecer en familia hasta alcanzar un tamaño apropiado para la sopa o el fricasé y que, en ocasiones, cuando lograban sobrevivir, no terminaban en la cazuela porque un cariño casi filial impedía el sacrificio y a proles de tilapia que luego de nadar en improvisadas peceras o cubos, compartían, al crecer, las bañeras con sus dueños antes de ser descuartizados en filetes para remediar, a duras penas, dos almuerzos o una cena de cumpleaños.

Quedaron en promesa socialista las vacas enanas, una especie genéticamente trastocada, llamada también a vivir en la casa del cubano común para dar, por seguro, el litro de leche a los niños más allá de los siete años y a los ancianos carentes de proteína.

De tantos desaguisados, que emulan escenas del mejor teatro vernáculo, parece ser la claria, el animal que dejará una huella indeleble en el noble ecosistema cubano donde no abundan depredadores significativos. El impresentable pez caminante ha ido liquidando especies endémicas acuáticas y otros componentes de la fauna como roedores y pájaros. Noticias, sin embargo, que no parecen amedrentar a quienes en este mismo momento la consumen o comercializan no solamente como filetes, sino en forma de croquetas, frituras, ceviche o picadillo.

Viajeros llegados de Cuba dan cuenta de clarias gigantes con más de cien libras de peso, pescadas con pollitos como carnadas incautas. Se habla de que tienen las panzas atiborradas de ratones cuando son despedazadas para la venta y que los turistas las disfrutan como si fueran exóticos esturiones caribeños. Escuché a un cubano llegado de visitar a su parentela en Cuba, luego de muchos años de ausencia, contar como terminó en un hospital intoxicado con una nueva manera de ciguatera luego de un banquete familiar con clarias que no le habían identificado para darle la sorpresa.

¿Quién sabe si fue un trozo de claria la causa de la devastación digestiva que ha retirado para siempre al ''biotecnólogo en jefe'' de su agobiante tribuna? Paradojas de la vida, como en la famosa novela de Mary Shelley, el apetente e incontrolable monstruo parece dar cuenta de su voluntarioso doctor Frankenstein.

3 comentarios:

Fabian Archondo dijo...

Si ya viste el documental "Revolución Azul" escribe tus comentarios en esta sección, ayuda a la difusión de este importante documental

Irina Mix dijo...

Muy informativo este blog... A ver si logro disfrutar tu documental en diciembre. Exitos compañero!!

_Pixel dijo...

Felicidades por la Revolucion Azul, espero ver pronto los demas trabajos. Saludos.